La Oficina de información y análisis de la aviación civil (BEA) ha logrado recuperar con éxito la información acumulada en las dos cajas negras que fueron rescatadas del fondo marino a comienzos de mayo aumentando las esperanzas de familiares y de las compañías implicadas de conocer las causas del acciente. El primer informe, sin embargo, sólo será conocido en el verano boreal.
Después de casi dos años en las profundidades del océano, se temía lo peor: sin embargo los investigadores franceses confirmaban este martes que han podido recuperar todos los datos de las cajas negras del vuelo Air France Río París que causó la muerte de 228 personas el 01 de junio del 2009.
La Oficina de información y análisis de la aviación civil (BEA) ha logrado recuperar con éxito la totalidad de los datos registrados en esas grabadoras que pasaron 23 meses en el fondo del atlántico. La esperanza de las familias de conocer pronto la verdad sobre el hecho sin embargo ha encontrado un llamado a la calma en el comunicado de la BEA que confirmó que la lectura de los datos tomará algunas semanas y sólo en el verano boreal conoceremos un primer informe.
“Es una buena noticia, sobre todo después de dos años agotadores", declaró Jean-Baptiste Audousset, presidente de la asociación "Ayuda mutua y solidaridad AF447". "El mundo entero tiene los ojos puestos en el desenlace de este hecho, 32 países (que corresponden a las nacionalidades de los pasajeros) quieren saber", agregó el Presidente de la Asociación de víctimas brasileñas, Nelson Faria Marinho."Ahora entramos en una nueva etapa. Nosotros no buscamos venganza, lo que queremos es centrarnos las consecuencias pues nuestro objetivo es mejorar la seguridad aérea precisó Audousset”.
Según publica el diario francés le Figaro Airbus, la constructora del avión, habría enviado este lunes un mensajes a las compañias aéreas que usan el modelo A330, el mismo del accidente, con el título"Información Accidente Telex". En el texto aseguraría que, según los análisis de las cajas negras, el avión cumpliría con las normas de seguridad y por tanto, no habría ninguna modificación a hacer ni control técnico a pasar.
Si Airbus fuera exculpado sería un giro radical en la investigación pues fue el constructor el primer señalado después del accidente. Y de hecho por precaución tuvo que cambiar todas las sondas Pitot de sus aviones, pues éstas fallaron en el vuelo Río París.Sin embargo, la BEA ha desmentido este anuncio y lo ha calificado de prematuro.
A comienzos de mayo las cajas negras que en realidad son naranjas, fueron sacadas a la superficie. Las dos grabadoras registran diferentes datos dentro de un avión: La FDR (Flight Data Recorder) graba los parámetros de vuelo como velocidad, altitud y trayectoria. En cambio la CVR (Cockpit Voice Recorder) contiene las conversaciones de los pilotos, los sonidos y anuncios de la cabina de pilotaje.
Según Pierre Sparaco, miembro de la Academia del aire y del espacio, estos datos permitirán confirmar hipótesis como aquéllas que podrían inculpar a Air France y su tripulación. “Estos datos permitirán verificar que había realmente dos pilotos en la cabina. Era una tripulación de tres pilotos y, por lo tanto, debía haber al menos dos en la cabina durante todo el vuelo”, añadió Sparaco.
Hasta ahora lo único que los investigadores han podido determinar es que la falla a raíz del congelamiento en las sondas de velocidad llamadas “Pitot” sería una de las causas del accidente, pero no puede explicarlo por sí sola.
En esta investigación Airbus y Air France han sido procesados por homicidio involuntario. Tras recatar los datos, ambas compañías han manifestado públicamente su esperanza de encontrar la verdad para tranquilidad de las familias y las propias compañías.
Por su parte la ministra de la ecología francesa Nathalie Kosciusko-Morizet ha destacado que encontrar las cajas negras y recuperar los datos ha sido un éxito y "prueba que (el Gobierno francés) tenía razón en autorizar tantos esfuerzos", refiriéndose indirectamente a los más de 35 millones de euros que ha costado la operación de rescate, suma que ha sido repartida entre el Estado, Airbus et Air France.
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